JULIAN DRAXLER, DE "AZUL REAL"

Hace poco más de un año, Julian Draxler decidió que era el momento de emanciparse. Se sentía lo suficientemente adulto como para dar un paso de ese calibre. Eso sí, decidió fijar su nueva residencia a escasamente cinco minutos de la casa de sus padres. El joven Julian sigue yendo cada día a la hora del almuerzo al hogar familiar, para saborear las ricas viandas que prepara su madre...Tal y como sucede en su vida personal, en la profesional también ha sido un precoz que, de vez en cuando, necesita igualmente de alguien que le ampare y tutele. Y es que Draxler (a sus escasos 19 años) pertenece a esa nueva generación de futbolistas alemanes a los que los acontecimientos les van sucediendo de una manera muy vertiginosa. La semana pasada, se convertía en el jugador más joven en la historia del Schalke 04 en alcanzar 100 partidos con la camiseta de dicho club. Y eso, indudablemente, entraña vértigo. El propio de un futbolista que se sabe ya indiscutible en uno de los equipos de referencia de la Bundesliga. Julian Draxler tiene la fórmula del ADN del Schalke grabada en la piel.

Formado desde los 8 años en las categorías inferiores, la oportunidad en el primer equipo le llegó en enero de 2011, de la mano de Felix Magath. Continuó creciendo con el siguiente técnico, Huub Stevens y tras la destitución de éste antes del último parón invernal, ha pasado a ser una de las piedras angulares del actual entrenador, Jens Keller. Futbolista diestro, de apariencia desgarbada y que comenzó a despuntar por el costado izquierdo del ataque (posición ideal para trazar diagonales) los últimos movimientos de mercado lo han reconducido hacia el centro. La llegada de un zurdo puro como el brasileño Bastos, sumada a la salida de otra de las jóvenes figuras del equipo, el mediapunta Lewis Holtby, han situado en el campo a Draxler justo por detrás del ariete, en un claro sistema 4-2-3-1. Desde ahí ve puerta y acumula esta temporada 7 tantos en 22 partidos de Bundesliga. Tantos como el máximo artillero del equipo, el holandés Huntelaar. Pero volviendo al comienzo del escrito, Draxler necesita tutela. Alguien que le prepare la comida en casa y alguien que en el campo le haga seguir creciendo. Evidentemente a su edad aún no ha tocado techo y sus posibilidades son infinitas. Jens Keller es un entrenador de cantera y probablemente esto sea un punto a favor. El tiempo dirá si estamos ante un líder histórico de los "Azules Reales". Las sensaciones son inmejorables. Esta semana se llevó el revés de la eliminación en Champions. Edad tiene para levantarse y volver a caerse cuantas veces hagan falta. Sin prisas, por favor. Se puede estar gestando un auténtico "crack".